Después de casi cuatro años de vida de EnBrazos, nuestro bebé ha ido creciendo y cada vez tenemos más claras nuestras virtudes y también nuestras limitaciones. De ahí la necesidad de poder abordar nuestra declaración de intenciones, para todos aquellos que estáis pensando en si somos nosotras o no las que os tenemos que ayudar con la búsqueda de la persona idónea para el cuidado de vuestros hijos, aquí van 🙂

PODREMOS AYUDARTE SI…

1) Priorizas por encima de cualquier otra cosa el bienestar de tu hijo/a. La limpieza de la casa, en el caso de elegir un perfil de cuidadora, ha de ser secundario. Es decir, aunque estamos de acuerdo en que es una maravilla si tienes que ausentarte, llegar a casa y que muchas de las tareas estén hechas, para nosotras este tipo de tareas han de realizarse mientras los niños duermen, en momentos que están en el cole o en determinados momentos que así se propicien. Lo que no nos gusta es dejar a los niños desatendidos por este asunto.

2) Eres consciente que la persona que cuida de tu hijo ha de estar convenientemente remunerada. ¿Quieres tener a alguien «quemado» y que esté deseando irse con otra familia que le pague más? Pues bien, nosotras recomendamos unos mínimos. Si la persona que cuida de tus hijos está demasiadas horas o mal pagadas repercutirá de alguna manera durante el tiempo que está con ellos.

3) Si aceptas y asumes que las personas no somos perfectas y que hay que priorizar en las cualidades que buscas en la selección.

4) Trabajamos en equipo, no sólo entre nosotras (Azucena, Emma, Milady y Raquel), sino con las familias y niñeras con las que trabajamos. Así que agradecemos sonrisas, buenas caras, amabilidad y feedback de lo que hacemos (un email también puede estar cargado de «buen o mal rollo»). Estamos encantadas de recibir críticas, pero por favor, desde el respeto.

5) Si nos vas a pagar en plazo. Así de simple, cuando una niñera nuestra se incorpora, en el plazo de siete días se hacen efectivos nuestros honorarios. Sin más. Te agradecemos cumplas los plazos y no nos hagas dedicar tiempo a este asunto al que no aportamos valor alguno.

6) Si entiendes que nuestra manera de trabajar requiere tiempo. Sorry, no somos tan rápidas como nos gustaría. Para que os hagáis una idea, como media, nos valen una o dos personas de cada diez que entrevistamos.

7) Si quieres una persona externa. Si necesitas alguien de forma interna, lo siento, no podremos ayudarte. Sólo hacemos excepciones si el perfil es de una persona cualificada.

8) Si entiendes que, por el tipo de trabajo, no podemos devolverte las llamadas inmediatamente. Nuestra forma de trabajo implica estar permanentemente conectadas, pero poder conciliar nuestras vidas familiares. Además nuestro trabajo como psicólogas o profes no permite coger el teléfono mucho. Sería absurdo ayudar a otros y descuidar lo nuestro. Somos madres (bueno, Emma acaba de acoger un perrito así que también está en la «crianza»),  así que intentamos dedicar tiempo a nuestros hijos. Por tanto, la manera idónea para contactar con nosotras es el mail. Estaremos encantadas de poneros cara y recibiros e informaros en la consulta, previa petición de cita. O bien a través de skype.

Gracias por vuestra comprensión y esperamos aportar algo de luz a nuestro trabajo.

Raquel Huéscar